Una experiencia teatral y gastronómica de primer nivel te acercará a los felices años 20
No son numerosas las veces que la vida te brinda la oportunidad de viajar al pasado, de revivir una época donde la felicidad se escribía con otra tinta y un estilo diferente. Por eso, cuando eso ocurre, hay que subirse al tren y exprimir el momento al máximo. Cuando un espectáculo se tilda de misterioso y no sabes bien lo que puedes encontrarte, es cuando más se disfruta, cuando la sorpresa te acompaña en cada estancia de la mansión. Es lo que ocurrió hace unos días cuando desde La Voz Cultural asistimos a The Great Gatsby, una experiencia inmersiva donde el teatro y la música tienen una presencia importante.
Long Island es el lugar donde se ambientan las cenas majestuosas, los bailes de charleston, las confesiones y líos amorosos entre sus protagonistas. Si te adentras en esta experiencia inmersiva, podrás descubrir que cada gesto está cuidado al milímetro. Lo primero que nos llega es una invitación VIP cortesía del anfitrión donde puede leerse : “Mr Gastby requiere su asistencia a la cena privada que celebrará” y a modo recordatorio la hora y el lugar del encuentro.

Como si fuéramos una personalidad importante de la alta sociedad neoyorquina, nos adentramos en la propia historia del Gran Gatsby, adaptación de la novela de F. Scott Fitzgerald. Un grupo de personas se reúnen en la puerta principal del hotel Mandarin Oriental Ritz, el escenario que acogerá esta experiencia inmersiva. Exclusiva y repleta de detalles. Muchos de los invitados seguían el dresscode de estos años locos y dorados. Estolas de marabú, perlas, plumas y vestidos y trajes acordes con la época. Un viaje al pasado que disfrutamos desde el primer momento. Yo, que soy poca asidua a disfrazarme, quise hacerlo para esta ocasión y fue mágico sentirse un personaje más de la narración.
Nick Carraway, Daisy Buchanan, Jordan Baker, Myrtle Wilson y Jay Gatsby nos abren las puertas de la mansión donde se sucederán acontecimientos de lo más inesperados. Los momentos previos a que dé inicio el espectáculo, cada uno de ellos se van acercando a los invitados para hacerles partícipes e interactúan con ellos ¿Nos hemos visto en Mónaco”?, “Tu cara me suena”, “Vais guapísimas”, son algunos de los comentarios que comparten con los asistentes, mientras que estos van cogiendo asiento y se preparan para una velada única e irrepetible. Mientras que el público disfruta del espectáculo, puede degustar una cena exquisita, acompañada de champán en uno de los salones exclusivos del Hotel Mandarin Oriental Ritz, referencia de lujo en la ciudad de Madrid.

La inmersión de esta experiencia hace que el elenco maneje una improvisación constante, no hay guión y cambia cada día porque el público es diferente. Lo más bonito que me he encontrado yo es que los actores y actrices te miran directamente a los ojos, incluyéndote en su narrativa, en su acting.
Mark Curado pone el toque de elegancia y el carácter oculto del protagonista, de ese Gatsby que al final de la función revela su verdadera cara. Por su parte, Patrick Rabion interpreta con gran talante al inocente primo de Daisy que actúa como confidente de Daisy y Jay. La joven actriz Carmen Izquierdo nos conquista con su dulzura interpretando a Daisy. Uno de lo que más nos sorprende por su trabajo actoral tan entregado es el del uruguayo Leonardo Noda aunque quizás su aparición es una de las más breves al igual que la presencia estelar de Richard Crawdford, el director que también aparece como actor. También hay que destacar la naturalidad de Isabel Dugo en el papel de Jordan Baker y la espontaneidad y talento como violinista de la santanderina Carla Moro.
Brillantes son los números musicales de la mano de Beatriz Villar que interpreta La vie en rose, entre otros temas con gran gusto y elegancia y los bailes llenos de vida de Jessica Alonso, actriz y vestuarista de la obra . The Great Gatsby conlleva una alta producción que hace que sea una propuesta no apta para todos los bolsillos y algo exclusiva pero que sin duda merece la pena.
Secret Theatre es la compañía fundada en 2009 por Richard Crawdford que ha dado la vuelta al mundo en diferentes países. Su meta fue crear más de 20 experiencias. Destacan Edward Scissorhandsen Nueva York, El Club de la Lucha en Londres, Fight Club en Singapur, Freakazoid en Los Ángeles y el más reciente, el exitoso espectáculo que ha batido récords en Hong Kong “The Immersive Gatsby Dining Experience”, que ahora podemos disfrutar en Madrid en el Hotel Mandarin Oriental Ritz.
Secret Theatre también son los creadores de la laureada experiencia inmersiva online “Redemption Room”, la cual está disponible en 25 países alrededor del mundo.
Agradecimientos a Gran Vía Comunicación