Explosiva, valiente y con gran talento para la interpretación. Hace más de ocho años que conocimos a la actriz de profundos ojos verdes que saltó a la fama con El Internado, esa ficción de misterio de la que nadie dejaba de hablar en sus ratos libres.
De ser la adolescente en la que se miran las nuevas generaciones por su personaje de Carol en El Internado, la serie con la que saltó a la fama, a ser reconocida como estrella mundial en Hollywood. Sus últimos trabajos, Blade Runner 2049, Knives Out o Waiting for Helen. Uno de sus primeros trabajos con los que llegó pisando fuerte fue Toc Toc (2015). Continuaría su ascenso con Juego de armas (2016) y Overdrive (2017), dónde coincidió en el hijo de Clint Eastwood y también actor, Scott Eastwood. Pero su verdadero despegue en el cine de Hollywood se produce con Blade Runner 2049 que le permitió trabajar con míticos e incombustibles como Harrison Ford o Ryan Gosling.
Pero eso no es todo. A sus participaciones en las producciones de Estados Unidos, se suman el de la chica Bond de la nueva película de 007 que tendrá de villano a Rami Malek (Bohemian Rhapsody). Es la primera vez que una actriz latina protagoniza una película por la que han pasado grandes actrices como Halle Berry, Mónica Belluci, Terri Hatcher o Eva Green.
Ana de Armas tendrá un papel protagónico en Blonde, el biopic de Marilyn Monroe que Netflix prepara para rendir homenaje a la explosiva actriz que marcó una época. Además, la joven se encuentra en reuniones para poner voz a Vaiana en la versión latina.
Fue una de las jóvenes promesas que salieron de la cantera de El Internado, una de la series estrellas de Antena 3 en su momento. En ella dio vida a Carolina Solís durante más de 50 capítulos. Desde El Internado no la hemos vuelto a ver en ninguna producción española. Sigue afianzando su experiencia en Hollywood donde tiene numerosas ofertas de trabajo. Ana triunfaba con un perfil enfocado al público juvenil pero siempre quiso sumar nuevos retos a su carrera profesional.
Mujer de armas tomar, se marchó hace cinco años de España para emprender un nuevo camino. Sin saber inglés, sin representante y con la maleta llena de sueños viajó a Hollywood para buscar una nueva vida. Lo arriesgó todo y la jugada le salió bien. Nunca tuvo un plan B, lo que hacía ver que confiaba mucho en su talento y en las nuevas oportunidades.
Cubana de nacimiento y española de adopción, Ana de Armas quiso probar suerte en el otro lado del Atlántico cuando era toda una estrella en España. Llega a nuestro país después de haberse dado a conocer en varias telenovelas cubanas y consigue un papel en la serie juvenil de El Internado que fue un gran éxito de audiencia y que elevó a su reparto a convertirse en ídolos adolescentes que todavía hoy muchos recuerdan con cariño y nostalgia. Nadie olvida ese divertido triángulo amoroso entre Carol, Iván y Marcos. Carol se enamora de Iván cuando es novia de Marcos y eso produce un fuerte enfrentamiento entre los dos jóvenes que acaban convirtiéndose en buenos amigos.
Dejó la serie dos temporadas antes de que finalizara. Antes de irse la vimos en la serie Hispania aunque no alcanzó tanto éxito. Después grabó varias producciones españolas Mentiras y gordas y Por un puñado de besos.
El papel de James Bond es de alguna forma el reconocimiento que buscaba la actriz en una carrera de fondo en la que no se ha relajado ni un segundo. Ana de Armas se encuentra en su mejor momento profesional dispuesta a dejar huella y hacer historia en el cine de Hollywood. España también espera volver a encontrarse con ella en sus pantallas. Las oportunidades no se acaban para una actriz que está cumpliendo su sueño.
