Pocas cosas hay tan especiales que cuando los latidos se disparan. Cuando se podía abrazar, cuando necesitábamos sentir en el único lenguaje que no entiende de estereotipos, la música, aparece uno de los estrenos más esperados de esta temporada. Anoche volvía La Voz, el talent de Antena 3 que ha demostrado estar en mejor forma que nunca con unas primeras audiciones a ciegas que no dejaron indiferente. Los coaches Laura Pausini, Antonio Orozco, Pablo López y Alejandro Sanz componen el mejor tándem posible, sensibles cuando se encuentran con un concursante que toca la piel, cómplices en las pausas y divertidos en el trato más cercano. No faltó la dulce locura de la italiana, Pablo y su piano, al que siempre acude por necesidad, el poder de convicción de Orozco y la calidad de Alejandro Sanz que fue el más afortunado. El madrileño consiguió cinco talents en la primera noche. Desde la sala de El Regreso, novedad de este año, Miriam Rodríguez esperaba para repescar a los concursantes que ya han sido descartados. Una tarea nada fácil para la gallega.
El programa arrancaba con los coaches versionando sus propias canciones. Sencillamente espectacular escuchar El Patio en la voz y el sentimiento roto de Laura Pausini, sin olvidar el talento que derrocharon cada uno de ellos en su estilo, en su vuelo, en su magia, siempre viva.
Esta segunda edición en la que pudimos ver una calidad musical muy alta, apostó por la historia personal de sus concursantes que provocó la emoción de los coaches y los espectadores. Marcos que se encontraba entre el público sorprendía a sus padres que con una eterna sonrisa y los ojos llenos de ilusión esperaban para disfrutar de la actuación de su hijo, tal como les había anunciado minutos antes Eva González. El joven que demostró un gran talento, terminó la actuación entre lágrimas porque más allá de la emoción del momento, Marcos estaba cumpliendo el sueño de su hermana Rebeca, gran admiradora de Orozco que había fallecido hace un año.
Francisco, fan de Laura Pausini no consiguió que ninguno se girara pero se llevó el recuerdo de agradecer a la italiana el refugio y amor que dejó en él su música después de quedarse huérfano. También conmovió la dulzura y sensibilidad artística de Marta Santos que fue el primer fichaje de Pablo López. La banda sudafricana Southside fue la encargada de estrenar el telón. A capella y con un sonido limpio y perfecto, las voces de sus cuatro componentes se entrelazaron y regalaron una de las mejores actuaciones de la noche. Inolvidable. Por su parte, Gonzalo Alhambra dibujó un horizonte de sentimientos en el plató con una versión preciosa de Pienso en tu mirá. Acompañado de su guitarra, hizo gala de un arte muy especial que empieza a dar forma desde que es un niño. Isaiah Kelly fue un gran descubrimiento, un gran fichaje. Una voz exótica y adictiva que se mueve en un sonido cercano al reggae pero capaz de hacer cualquier cosa que se le ponga por delante. El joven desprendió flow y muy buenas vibras durante una actuación única.
Además, vimos a gente con experiencia que buscaban una segunda oportunidad. Fue el caso de Cristie Sánchez que ya estuvo en otro conocido talent. La joven fue concursante de Operación Triunfo 2002, compartiendo experiencia con Manuel Carrasco o Nena Daconte. Pablo López y Antonio Orozco se dieron cuenta de quién era al darse la vuelta y recordar que habían cantado con ella en el pasado. La concursante quiere recuperar su carrera musical después de 17 años alejada de los escenarios tras la muerte de su hermana. Una ganadora de Menudas Estrellas también quiso probar suerte en La Voz, Johanna Polvillo que sigue luchando por vivir de la música, su gran pasión. Ahora, emprende un nuevo camino en el equipo de Orozco. Una de las más veteranas fue Mercedes Ferrer, cantante de alma rockera que cantó Vivimos siempre juntos, tema compuesto por Nacho Cano que le catapultó en los primeros puestos de la lista de éxitos. Sin embargo, en esta ocasión ningún coach se giró. “Tenía la sensación de que se parecía demasiado a la original”, confesaba Pablo López.
Miriam Rodríguez abraza en El Regreso, disponible en Atresplayer
La Voz apuesta por un nuevo formato de 12 minutos donde dos concursantes tienen la opción de tener una segunda oportunidad. Amor incondicional por sus raíces, por esas notas que le acarician la piel de una forma especial y una manera única de entender las canciones, Miriam Rodríguez sabe mejor que nadie lo que es ser parte de un talent y luchar por un sueño en el que la clave es ser tú misma.
Sencilla, divertida, cálida y amorosa, Miriam acompaña a las voces que se baten en un duelo decisivo. En este caso, Guillem y Julio son los primeros en estrenarse en El Regreso. Julio y su sentimiento con un tema de Cepeda, Por ti estaré y Guillem con un estilo muy personal arriesgaba con Lost on you. Este último fue el elegido para ser el candidato de la vuelta al programa. Los finales con Miriam prometen. Anoche, un fallo inesperado de luces. “Alúmbralo con una lamparita”, decía la gallega a la que vimos en su salsa, sin creerse que tuvieran que repetir la grabación ¡Momentazo!
Su carisma, naturalidad y profesionalidad sin duda están hechos para este formato. Gran elección
