No queremos que acabe el mito. Caronte duele y mira a los ojos de la forma más sincera. Alba Reche es arte en cada verso que escribe, cada referencia mitológica, cada historia, cada abrazo a la música en el que reconocemos una cantante y compositora que desnuda sus emociones y se deja el alma.
Después de escuchar las primeras notas, te sumerges en lo que parece otra dimensión, una nueva sensación que llega en forma de desgarro y de caricia. Alba Reche se convierte en un ser mitológico en su nuevo single más íntimo y personal que Medusa.
En la mitología griega, Caronte significa literalmente “brillo intenso”, una definición que conecta perfectamente con la sensación que genera la de Elche cuando crea su propia música y la comparte con su público.
El videoclip es un trabajo cuidado con todo detalle que desprende belleza en cada plano. Muy acertado el plano secuencia, sin un solo corte utilizado durante toda la canción que requiere de una precisión y gran complejidad a nivel audiovisual. El resultado es un videoclip de una delicadeza y calidad visual que deja sentirse más cerca de una historia, una canción, un recuerdo a la nostalgia, a lo que dolió y te dejó rota.
Caronte: La mejor versión de Alba Reche
“Vendí mi alma, no hubo opción. Sentí como reían. A oscuras les vi asomar. Por el cristal”. Alba Reche te habla de los fantasmas de su pasado, los que le hicieron olvidarse de sí misma, los que no dejaron ver lo que vale, que no le dejaron avanzar. Una letra profunda que conecta con las sensaciones de sus seguidores que se rompen en este momento y dejan escapar la emoción en un viaje inolvidable.
Caronte nos ayuda a conocer un poco más de Alba que te entrega todo lo que tiene y te encoge el corazón. Siempre convierte la música, su huella, su templo en algo único y especial. El lugar donde se encuentra y alcanza la libertad.
Cuando nos encontramos con Caronte, nuestro recuerdo viaja a la Academia de Operación Triunfo, cuando Alba se quedaba hasta tarde sentada al piano creando y componiendo sus propias letras, probando sonidos y nuevas melodías. Quizás algunas de las canciones incluidas en Quimera, su primer disco que ve la luz el 25 de octubre hayan salido de esa sala tan especial. La voz rota de Alba nos da la vida en cada tema que sale de su garganta. Caronte tiene la magia de transportar a cada uno a un sitio distinto según la experiencia personal que acaba unida en un sentimiento común compartido dentro y fuera de nuestras fronteras.
La letra de Caronte es muy cruda y muy real. Es ese momento en el que lo das todo por la otra persona sin recibir nada a cambio pero tú sigues al pie del cañón con unas imágenes que nos sumergen en una angustia asfixiante y una impotencia que nos llega muy adentro con una interpretación impecable de Alba que te rompe y acaricia.
Caronte es eso que pasa cuando cierras los ojos, el silencio se adueña del lugar y empiezas a escuchar la voz de Alba que te atrapa y te transporta a otro lugar donde las emociones emergen. Caronte es una canción que ha nacido para ser escuchada en acústico con un piano y una voz. Soñamos con una salita pequeña, unos suaves golpes de piano y una voz desgarradora que te deja sin palabras. Pedimos a gritos que se haga realidad en su gira.
La coherencia de cada detalle del videoclip es algo único. “Te canté hasta que me ahogué”. Entonces se agarra el cuello. Se ahoga. Llega el silencio. Y continúa. “Y te tapabas los oídos como si no pudieras ver”. Caronte es un viaje de un alma atormentada que ha sido utilizada y desprotegida. Íntimo, sencillo y emocional.
El segundo single de Alba está repleto de referencias mitológicas y parece que es algo que estará presente en todo su primer disco. Caronte era el barquero de Hades encargado de transportar las almas de los difuntos en su barca. Los difuntos debían llevar un óbolo para pagar su viaje. Por eso, los cadáveres se enterraban con una moneda bajo la lengua. Alba en este caso es un alma que paga su viaje. Entonces llega el negro y los focos del mal. Es un viaje del que no hay vuelta atrás. Las manchas negras quieren decir que sabe cuál va a ser su destino. Transforma un mito en su propia historia personal que sale disparada al corazón en forma de música.
Alba Reche es ella dejándose todo en una canción. Es una dualidad mágica. La historia tan real y personal se mezcla con el arte y la mitología. Hay mitos que dejan huella como la música de Alba Reche que llega para quedarse.
“Los cristales no se empañan, los ojicos piden calma”. Lo leemos en una de las partes de su disco físico. Sus letras dicen mucho más de lo que no se ve. También podemos leer de su puño y letra “Doy gracias a quien me salva, a quien me escucha llorar y ríe conmigo al llegar a casa. Doy gracias a quien me arropa, a quien me vuelva a llamar y me limpian de los ojos la sal”. Pareciera que los rechistas están dentro de estas letras porque Alba se ha convertido en la salvación de sus días grises y en el abrigo eterno. Con ella, se sienten arropadas, comprendidas y abrazadas, mientras que las lágrimas de sal asoman de unos ojicos que luchan con la quimera.
Hermosa reseña de “Caronte” gracias por explicar la canción con esas palabras tan acertadas, al leerte he entendido mejor “Caronte”.
Un saludo desde México…
Gracias por hablar tan bien de Alba Reche